Desde el silencio surgen hilos de humo bañados de tibieza, llegan susurros a través de esos aromas y son las percepciones las que dan lugar a aquellas charlas en comunión donde los temas tocados no son elegidos, sino que vienen dados por algo ajeno a nosotros que está presente todo el tiempo, pero que toma voz en esos raros momentos, ocasiones donde se le da lugar.