Contacto

De pronto... me encuentro en el umbral entre un mundo y otro sin darme cuenta de estar ahí.
Al parecer nada sucede hasta que desde mi postura estando acostado veo una figura de rasgos humanoides que no es algo humano.

Eso se acerca a mí, y comienza a extender lo que parece su brazo, en particular un dedo, yo sin poder moverme ni hacer nada lo miro actuar. Parece intentar ver si estoy o no consciente y me toca el rostro con su dedo extendido.

Ese contacto hizo que bruscamente regresara a mi estado normal, en el mundo de todos los días, persistiendo aún la sensación del contacto físico sobre mi cara.

La Fuerza en el Viento

Existe en el viento algo mas que solo aire en movimiento.

Hay una fuerza, vibrante, que reluce.

Esa fuerza en el momento indicado nos llena de poder, si logra tocarnos del modo adecuado. Para que eso suceda, debemos estar en un estado particular de atención que lejos está de ser algo relacionado con el azar.

Podemos estar cansados, incluso agotados mental o físicamente y aún así si logramos ponernos al alcance de alguna ráfaga de viento, podríamos llenarnos con su poder. Todo eso aplica también en caso que nos encontremos en un estado de plenitud.

Quizás a muchas personas esto les suceda habitualmente incluso sin tener ni la más leve sospecha.

Hoy puedo darme cuenta, puedo verlo conscientemente y se que esto pasó en varias ocaciones.